Por Evangelina Aguirre
76°aniversario del 17 de octubre, Día de la Lealtad
El 17 de octubre de 1945 trabajadores y trabajadoras de Argentina sellaron un vínculo que se venía forjando desde hace algunos años, cuando desde la Secretaría de Trabajo y Previsión, el Coronel Juan Domingo Perón, comenzaba a marcar el rumbo de una época trascendental en la conformación de la identidad de la clase trabajadora de la Argentina.
Los trabajadores y las trabajadoras dejarían su marca con aquella movilización masiva, demostrando su capacidad para defender las conquistas sociales obtenidas, resignificadas en el reclamo por la liberación del que había cambiado la realidad del pueblo. Aquella jornada de lucha quedaría en la historia como El día de la lealtad Peronista.
Era el subsuelo de la Patria sublevado y también brillaron ellas.
Muchas fueron las mujeres que ese día abandonaron sus puestos de trabajo desde Berisso, Ensenada, Avellaneda, Lanús, San Martín, y todo el cordón industrial del Gran Buenos Aires, para unirse a las columnas que marchaban. Eran trabajadoras, eran las mujeres, las invisibles que marchaban exigiendo la libertad de su líder. Como en muchas otras luchas la historia no las nombra ni recuerda. Fueron mujeres trabajadoras, representantes de otras y otros. Entre ellas María Bernaviti de Roldán (1908-1989), forjada al calor de la huelga de los frigoríficos de la zona sur en el año 1944, una sindicalista y política argentina, de ideales anarquistas, quien fuera la primera mujer elegida como delegada sindical en la empresa frigorífica Swift, fundadora del Sindicato de la Carne en Argentina y también del Partido Laborista que diera origen al peronismo. Ese 17 sacó a las calles a las y los trabajadores de los frigoríficos Armour y Swift; en otros sitios del gran Buenos Aires pasaba algo similar, pero se sabe que la zona sur nutrió el cincuenta por ciento de la Plaza. Caminaron, primero desde Berisso hasta Ensenada y luego a Plaza de Mayo. María fue una de las artífices de esa fecha, pero hubo más. Blanca Luz Blum, poeta y colaboradora de Perón, María Granata, escritora y periodista, Ana Carmen Macri, quienes luego tuvieron como tarea construir la Rama Femenina del Partido que nacía esos días, muchas quedaron inmortalizadas en las fotografías. La memoria popular recordará más adelante, también a Haydée Frizzi de Longoni, Maria del Carmen Casco de Aguer, Carmen Delia Maldonado, Nélida Domínguez de Miguel, Benedicta Fernández Aguirre, Emma Elvira Nicolini que dejando el trabajo en sus hogares, también participaron en esa jornada y a quienes, Eva Duarte de Perón poco tiempo después les asignara tareas relevantes.
Al final de la jornada Perón fue liberado y se dirigió a la Casa Rosada al encuentro de los y las trabajadoras, renunció al gobierno pero un año después volvería como presidente de la Nación, elegido por el voto popular. Esa movilización marcó el comienzo de un nuevo tiempo de luchas y conquistas, entre ellas la conocida como "Ley Evita" que daba el derecho y habilitaba a todas las mujeres de la Argentina a votar, primer paso para su incorporación formal al ámbito político, derecho con el que las mujeres demostrarían nuevamente su lealtad.